En el municipio de San Gil, ubicado en el departamento de Santander en Colombia, se encuentra un rió llamado Fonce en el cual se practica un deporte de aventura llamado Rafting o Canotaje en español el cual consiste en descender en una embarcación (bote inflable) en un rió el cual se mide según la clasificación del rió en cuestión asi:
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Clase I. Muy fácil. Aguas casi planas, muy poco turbulentas con olas pequeñas.
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Clase II. Fácil. Aguas un poco turbulentas con huecos y hoyos de no más de 25 centímetros, remolinos pequeños sin peligro alguno para un nadador.
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Clase III. Intermedio. Aguas turbulentas con huecos y olas medianas de no más de un metro, remolinos de cuidado para un nadador y de alguna consideración para una embarcación. La navegación requiere buena técnica y conocimiento del río. Existen algunos pasos técnicos de atención
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Clase IV. Difícil. Aguas blancas muy turbulentas pero predecibles. Huecos y olas de hasta dos metros, remolinos considerables para una embarcación. Pueden existir cascadas de consideración. La navegación requiere muy buena técnica y conocimiento del río. Existen pasos estrechos que requieren maniobras técnicas complicadas.
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Clase V. Experto. Aguas blancas muy turbulentas poco predecibles con olas y huecos de más de dos metros. Remolinos y cascadas de peligro. Requiere un grado de técnica experto y muy buen conocimiento del río. Necesidad de maniobras extremadamente técnicas.
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Clase VI. Extremadamente difícil o no navegable. Se considera muy difícil o imposible de navegar.
En el Río Fonce podemos encontrar todas las categorías anteriormente mencionadas, sin embargo en la parte comercial se manejan la I, II y III brindando mucha seguridad para el turista, todas las empresas deben estar avaladas, con sus equipos en regla y sus guías certificados por el Sena en diversos cursos para poder brindar el servicio.
De mi parte les comento que es una actividad interesante y brinda adrenalina para poder salir de la rutina diaria y lo pueden realizar niños desde los 7 años en adelante.